La mayor parte de las personas alérgicas a los alimentos pueden llevar una vida normal con solo unas pocas limitaciones en su dieta. No obstante, en ciertos casos de alergias múltiples, se hace más difícil obtener todos los nutrientes que el organismo precisa, lo que puede llevar a problemas asociados de desnutrición como la anemia.
En cuanto te sensibilizas a un alimento, tu sistema inmunológico produce anticuerpos cada vez que comas ese alimento.
Desafortunadamente no se puede pronosticar la gravedad de la siguiente reacción, lo que quiere decir que los efectos que son leves en la primera reacción pueden ser graves la próxima vez. Si tienes una alergia alimentaria, no debes exponerte al peligro de comer un tanto de ese producto alimenticio y padecer otra reacción. Evita ponerte en riesgo, infórmate de los ingredientes y en el caso de dudas no lo comas.
Si tienes una alergia o bien intolerancia severa, recuerda que cuando comas por poner un ejemplo en una cafetería o un alergenos alimentarios sintomas restorán, hay formas de reducir las posibilidades de comer algo a lo que eres sensible. Notifica al personal sobre cuáles son tus necesidades dietéticas y acerca de la gravedad de tu alergia o intolerancia alimentaria.
Lee esmeradamente el menú para ver si en el nombre o en la descripción del plato hay alguna mención al producto alimentario que te puede provocar reacción.
Pregunta siempre y en todo momento al camarero o bien camarero sobre los ingredientes del plato para contrastar que no contiene la substancia alergénica. Por ejemplo, una base para pizza puede contener un ingrediente inopinado, o las verduras pueden llevar un tanto de mantequilla, o la salsa contener leche en polvo.
Debes llevar cuidado con determinados platos y cocinas como la norteafricana, la cocina china, tailandesa, india... Estos tipos de comidas habitualmente utilizan cacahuetes, frutos secos y sésamo, con lo que las personas alérgicas a estos comestibles habrán de ser muy cuidadosas. Además de esto, en ocasiones no es obvio que una comida esté preparada con uno de estos ingredientes.
En caso de duda, ¡no te lo comas! Si no puedes estar seguro de que un plato está libre de los ingredientes que te generan la alergia, lo más seguro es no tomarlo. Si eres alérgico a cacahuetes, nueces y semillas, pregunta si el plato contiene alguno de estos ingredientes o algún tipo de derivado efectuado con ellos como el aceite.
Para evitar una reacción alérgica, debes anotar las cosas a las que eres alérgico y tomar nota de cualquier reacción cruzada. El alergólogo y el dietista pueden proporcionarte orientación sobre qué alimentos puedes o no comer. Debes ser consciente de los efectos y consultar al médico siempre y cuando tenga dudas sobre algo.
Lee la lista de ingredientes en la etiqueta de cada comestible preparado que estés pensando comer. Muchos alérgenos, como cacahuetes, huevos y leche, pueden aparecer en comidas preparadas con las que en principio normalmente no se les asociaría.
Cuando un individuo tiene una alergia alimentaria, su organismo identifica incorrectamente que una proteína es nociva. El anticuerpo inmunoglobina E (IgE) ataca esa proteína con un conjunto de productos químicos que son los que producen los síntomas que sufre el paciente.
Ciertas personas son alérgicas a determinados comestibles, con lo que comer estos alimentos podría enfermarlos e incluso poner en peligro su vida. Hoy día no hay cura para las alergias alimenticias y la única manera de supervisarlo es evitar los alimentos que les hacen enfermar.